viernes, 24 de abril de 2009

Abrazar

Miles y miles de palabras se han de haber escrito sobre los abrazos, pero ninguna de las miles (al menos las que he leído) han logrado acercarse ni un poquito a lo que pasa en el corazón cuando uno se encuentra entre esas fuerzas... Yo también hago mi intento.
Comprensión, confianza. A veces una sonrisa previa. Siempre una mirada sintonizada, que dice todas las palabras que estaban faltando... o sobrando.
Cercanía, no solo física de los cuerpos, sino del espíritu que se ha encontrado con el del otro, ha roto en mil pedazos el cristal de la eterna distancia y desafiando al individualismo obligatorio de nuestros días se anima tímidamente a abrirse, a darse y recibirse.
Fuerza. Un buen abrazo casi duele, porque en el contacto de los brazos se transmiten los sentimientos y eso hace que se contraigan los músculos para acercarnos más. Más, más y más hasta que entiendas lo que siento, hasta que lo sientas, hasta que sea tuyo mi sentir.
Caricia que alivia, que reconforta, que da paz. Se aliviana la tensión del sentimiento porque ya todo ha sido comprendido, porque ya has tocado mi corazón y yo el tuyo, porque ya hemos quedado así abrazados para siempre.
De nuevo mirar a los ojos y sonreir. Traicionando al sistema en nuestra escencia más humana, te abrazo.

No hay comentarios:

a patapila

a patapila es un blog de descarga, un cable a tierra de la vida que me ataca, que me invade con armas de risa y lágrimas. Un diario de viajante del mundo que derrocha poesía que nadie lee (o nadie escribe) y se escribe a sí mismo con olvidos y recuerdos, pasiones y broncas, inquietudes y certezas raras. Un espacio que comparto de las huellas descalzas que el tiempo deja, y que le dejo al tiempo.

YA ESTÁS ADENTRO, DEJÁ TU HUELLA...

Haciendo click en el título de cada texto podés hacer comentarios... Ya estás adentro, descalzate y dejá tu huella...


En el norte se dice "a pata pila"
para decir "descalzo".

andando a pata pila se saborea mejor el
mundo, se sienten hondo los dolores
y las tibiezas del camino...

Hay que aprender a caminar a pata
pila, para no tener miedo ni andar cuidando
de no pisar ninguna espinita. Hay que animarse y
disfrutarlo...


A pata pila como los niños , como
los aborígenes, como cuando nacimos.


-------------------------------------