domingo, 22 de marzo de 2009

¡Que llueva, que llueva!

Llueve afuera. O adentro. Lo mojado está confuso. Se patinan los zapatos en el barro y las ideas en el corazón: se caen, se golpean contra los sentimientos y a veces se resisten a volver a nacer. Otras veces vuelven tercas a levantarse tratando de hacer coincidir el querer con el pensar.

Quizás hay goteras en el techo, y por eso tengo como agua en los ojos. ¿O será que está el alma de Dios agujereada por tanto tiroteo y llueve su dolor de vernos dolernos? O a lo mejor es que toda el agua del mundo esta noche está callendo sobre mí, empapándome de realidad, de realismo, de vida, de verdad.

Sea como sea, molesta el agua, estar mojado molesta (quizás por lo confuso). Es incómodo, se hace difícil moverse porque la ropa pesa en el haber experimentado el palo en la espalda, el hambre en la panza o la indiferencia en la mirada. Es incómodo porque nos recuerda que somos humanos y no solamente máquinas de comprar.

Que llueva, que llueva, que la bruja no está en la cueva todavía, pero pronto lo estará, y cantarán los pajaritos. Pero mientras la apresamos, que llueva, que llueva.

Que llueva para que sintamos hondo el frío de la soledad, para que se lave nuestro cerebro de todo el polvo que no nos deja ver las cosas como son. Que llueva afuera y adentro, bien confuso, para que sepamos de una vez que somos todos una misma humanidad.

Que llueva, que llueva la misma lluvia para todos, a ver si de una buena vez nos aprendemos hermanos.

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a patapila

a patapila es un blog de descarga, un cable a tierra de la vida que me ataca, que me invade con armas de risa y lágrimas. Un diario de viajante del mundo que derrocha poesía que nadie lee (o nadie escribe) y se escribe a sí mismo con olvidos y recuerdos, pasiones y broncas, inquietudes y certezas raras. Un espacio que comparto de las huellas descalzas que el tiempo deja, y que le dejo al tiempo.

YA ESTÁS ADENTRO, DEJÁ TU HUELLA...

Haciendo click en el título de cada texto podés hacer comentarios... Ya estás adentro, descalzate y dejá tu huella...


En el norte se dice "a pata pila"
para decir "descalzo".

andando a pata pila se saborea mejor el
mundo, se sienten hondo los dolores
y las tibiezas del camino...

Hay que aprender a caminar a pata
pila, para no tener miedo ni andar cuidando
de no pisar ninguna espinita. Hay que animarse y
disfrutarlo...


A pata pila como los niños , como
los aborígenes, como cuando nacimos.


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